Su presentación trató sobre el Desarrollo Inclusivo en los Jardines Infantiles y las posibilidades de las metodologías de Investigación Acción Participativa.

Ignacio Figueroa durante su exposición. Foto: Twitter @JUNJI_Chile.
Ignacio Figueroa durante su exposición. Foto: Twitter @JUNJI_Chile.

En agosto se llevó a cabo el primer Seminario Latinoamericano de Inclusión “Oportunidades para contribuir y valorar la diversidad en Educación Parvularia”, organizado por la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI), el cual contó con la participación del académico del Centro de Desarrollo Cognitivo (CDC), Ignacio Figueroa Céspedes.

La Presidenta Michelle Bachelet inauguró la primera jornada del seminario, junto a la subsecretaria de Educación Parvularia, María Isabel Díaz, y a la Vicepresidenta Ejecutiva de la JUNJI, Desirée López de Maturana. La mandataria celebró la oportunidad, refiriéndose a la importancia de la formación de niños y niñas y de “garantizarles, desde el comienzo, condiciones de equidad, de justicia, de bienestar y de integración que van a redundar en enormes beneficios personales para ellos en el futuro, pero no sólo personal, también para sus sociedades”.

Durante la segunda jornada, el seminario contó con la participación del académico y coordinador de Formación Continua del Centro de Desarrollo Cognitivo, Ignacio Figueroa Céspedes. Su exposición se tituló “Desarrollo inclusivo desde procesos de Investigación – Acción: Oportunidades y Desafíos en el contexto de la educación parvularia”.

En la oportunidad el docente puso énfasis a la mirada de la investigación acción en los procesos de desarrollo inclusivo de los jardines. Profundizó en dos experiencias: una con la “Guía para Inclusión Educativa” de Booth y Ainscow y otra a partir del desarrollo del Programa “Estrategias Mediadoras para el aprendizaje”, realizado con Fundación Integra. De esta forma, Figueroa enfatizó en la construcción colaborativa de estrategias pedagógicas mediadoras, como vehículo para la generación de experiencias pedagógicas más inclusivas en educación parvularia, contemplando procesos participativos y colaborativos en las distintas comunidades.

Para Figueroa, es fundamental que las educadoras desarrollen un perfil crítico en torno a sus prácticas pedagógicas, de forma tal que puedan generar comunidades abiertas a la diversidad, a partir de un análisis ético y pedagógico compartido. Esto implica transformar culturas, políticas y prácticas considerando transformaciones en los distintos espacios pedagógicos, a partir de las interacciones. Este proceso de cambio implica un “proceso de autorreflexión, cuestionamiento y discusión que se va construyendo”. Explicó que el “llevar valores a acciones en la práctica pedagógica” nos permite orientar la “eliminación de las barreras al aprendizaje y la participación” de los niños y niñas y de la comunidad en su conjunto.

En ese sentido, el docente expresó que la mirada de la investigación acción permite reconocer los valores subyacentes la práctica y conectarla desde una perspectiva crítica a lo global y a lo local, problematizando y distinguiendo brechas de desarrollo respecto al aprendizaje y la participación, “para luego generar un plan de acción” en conjunto con la comunidad. En este contexto, asociado con el desafío que implica hoy en día abordar la diversidad desde la educación formal, Figueroa rescató la riqueza que significa la llegada de niños y niñas migrantes a los jardines y salas desde una perspectiva de pluralización cultural.

El evento tuvo el objetivo de generar instancias de diálogo y participación entre los diversos actores que forman la Educación Parvularia. Asistieron especialistas de países como Argentina, México y Colombia, así como de distintas organizaciones y casas de estudio nacionales.